NOCHE DE SAN JUAN EN HARIA

No cabe duda que la noche de San Juan en Haría es una noche especial y llena de magia. Ya desde el siglo XVI se celebra en el municipio norteño la festividad de San Juan.

Los vecinos, siguen transportando a hombros al Santo Patrón, desde la Ermita de San Juan hasta la iglesia en el centro del pueblo, donde debe permanecer 8 días antes de ser devuelta a la ermita que lleva su nombre.

Antiguamente  venían de todas partes de la isla y los vecinos solían ofrecer cama y comida durante toda la fiesta. Se hacían hogueras en  las cumbres de las montañas del valle y en el centro del pueblo la más grande, que además los jóvenes trataban de saltar, para así ahuyentar a los malos espíritus.

En 1964 se introdujo la quema de un muñeco de trapo hecho a tamaño real, al que llamaron “Facundo”, después de su quema, las brasas se aprovechaban para asar piñas de millo y sardinas. Una vecina de Punta Mujeres ha sido la encargada de hacer a Facundo los últimos 40 años.

Es en 1994 cuando un grupo de jóvenes norteños decide hacer algo diferente para la noche de San Juan. Querían darle un toque de misterio y diversión y así surge la idea de los “Diabletes”, unos seres con aspecto terrorífico y grandes cuernos. Deciden formar un grupo con jóvenes del municipio, proponen su idea y reúnen a un grupo de 12 personas. Ellos mismos diseñaron y confeccionaron tanto sus trajes como sus  mascaras, que según dicen son únicas porque se rompe el molde después de su creación.

En sus primeros años la aparición de estos “Diabletes” en la hoguera de San Juan era un misterio. Ellos pedían no ser anunciados y así poder sorprender al público asistente. Al principio se realizaba la quema de Facundo delante del mercado de artesanía. Cuando todo el mundo estaba ya preparado para ver como se encendía la hoguera estos “Diabletes” aparecían por las azoteas de las casas, trepaban por paredes altas y peligrosas, y al son de los tambores realizaban una danza alrededor del fuego. Crearon desde su nacimiento una gran expectación y tuvieron una gran acogida por parte del público asistente, tanto es así que ya llevan más de 20 años siendo parte imprescindible de esta noche mágica en Haría.

Hoy en día el espectáculo de los diablos de Haría es más que conocido. Grandes y pequeños esperan su salida hasta bien entrada la noche. Son muchos los que se desplazan hasta el norte para poder disfrutar de esta noche única y diferente.

Los chicos y chicas que forman los “Diabletes” siguen estando en el anonimato y solo ellos saben quienes son los integrantes del grupo. Ellos deciden todo lo que respecta a sus trajes y su espectáculo y cada año preparan su aparición intentando sorprender al visitante con su “Danza del Fuego”. Algo diferente para una noche llena de misterio en la que se da la bienvenida al verano.